Vida y muerte
La meta en la vida es, a menudo, llegar a ser alguien, alguien que importe, alguien que sea querido, alguien rodeado de personas. Conseguir sobrevivir la muerte no físicamente sino espiritualmente. Dejar un legado y, por muy egoísta que suene, saber que tu muerte y tu vida le han importado a alguien, le han echo sufrir, les ha dolido, y la han disfrutado a tu lado. Que la muerte no sea el fin de una vida sino el comienzo de una nueva mediante recuerdos.